Una nueva obra arquitectónica política, enfrentará nuestra sociedad el próximo 11 de abril. Todo ello, en parte, la elección de los responsables de elaborar la “nueva” constitución que, en las calles, exigió nuestra sociedad chilena.

Sin embargo, las reglas fueron impuestas por los mismos parásitos de siempre, empresarios y economistas, representantes de un sistema político partidario ajeno a los intereses sociales de los habitantes de nuestro país. Cítese normas custodiadas por el servel y el tribunal constitucional. De esta manera, los que claramente se opusieron al cambio exigido en las calles, respecto del cambio constitucional, han sido y serán quienes elaborarán la próxima constitución. ¡Parece un chiste de mal gusto! Las informaciones públicas y estadísticas así lo demuestran de manera clara y concisa.

Algunos antecedentes: De acuerdo a cifras oficiales de un 100°/° de los constituyentes un 60°/° son independientes y el 40°/° serían los títeres presentados por los partidos políticos, sectaristas. Es decir, 1.374 son candidatos, de los cuales 825 serían independientes, muchos de ellos apoyados, también, por partidos políticos y, aproximadamente 547 serían títeres de algún partidismo. Claramente estos últimos, representantes de la casta gobiernista, los que mantienen el actual sistema constitucional intocable y que extrañamente en el último tiempo se han mostrado “interesados” en realizar “cambios” a la actual constitución dictada por criminales. Algún gobernante lo dijo una vez “Chile, un país que se rige por una constitución que le heredó un criminal” …una verdad vergonzosa, pero absoluta.

Luego hacemos el simple ejercicio que ya todos conocemos respecto de los dos tercios para aprobar el cambio y nada impedirá que los pocos sectarios veten los cambios. Se requieren al menos 103 votos de 155, para aprobar un cambio… recordemos que los “independientes” serian 93, de 155 (60°/°) si todos son electos y lo llevamos a porcentajes, aun así, los cambios serán rechazados. Solo estadísticas.

Pero veamos cuáles son los intereses sociales, cuya esperanza está en la nueva constitución: ¿Dar solución definitiva a la problemática de los pueblos originarios?… ¿Impuestos al combustible?… ¿Peajes?… ¿Carreteras?… ¿Agua de todos?… ¿Igualdad en derechos?… ¿Educación igualitaria?… ¿Nacionalización?… Ante estas interrogantes que son los puntos álgidos, Usted, estimado lector, ¿Cree que los representantes del empresariado que fueron impuestos por este sistema corrupto, aprobaran estos cambios?… ¿Arruinaran sus negocios?… Para eso están y trabajan los lacayos serviles de los actuales partidos políticos, impidiendo todo acceso y representatividad de las organizaciones sociales, ellos son los “profesionales” que nos indican claramente cuáles son nuestras necesidades. Como en Traiguén, el municipio contrata a “profesionales” para que nos digan cuales son nuestras necesidades y nos imponen soluciones… profesionales. Al menos descubrieron que nuestra ciudad se llama Traiguén y la identificaron con ostentosas letras en los accesos principales ¡Que astucia! ¡Qué necesidad más imperativa!!

La gran mayoría de los candidatos a constituyentes fueron elegidos sistemáticamente a través de artilugios ideológicos preestablecidos con la sola intención de evitar la participación ideológica de quienes estuvieron y apoyaron el, hoy reconocido políticamente, ESTALLIDO SOCIAL.

La casta política intentará mantener su poder ideológico a través de sus serviles, rechazando cada cambio radical hoy exigido ilusamente por una sociedad cansada y agotada del abuso y la indolencia partidista.

Los gobernantes sirven y solo son herramientas útiles a sus partidos, es decir al empresariado que mantiene los partidos políticos. Eso es un hecho innegable en nuestro país. Localmente tenemos claros argumentos, los títeres sobran.

Lo expuesto son estadísticas prácticas y el análisis no está demás para preparar a una sociedad que sueña con la igualdad ante la ley y una justa distribución de los recursos. Sueño que los parásitos de siempre impedirán se concreten.

A veces nos preguntamos si la “pandemia” no es el artilugio perfecto para mantener el idiotismo colectivo y evitar que se mezclen ideas, un plato perfecto para los interesados. Ya lo dijimos una vez, en dictadura fueron los ovnis y las apariciones divinas, rimbombante. Y no argumentamos la inexistencia del virus como tal, que es reconocido como un virus más por especialistas en el tema, como el europeo Alfredo Mirolli. El extraño virus que, en chile, no afecta a los que viajan en buses, metro, avión, tren, a los que usan “permisos” o a los trabajadores en los carros de muerte, ni tampoco en los eventos municipales locales como las ferias o los lugares de trabajos municipales, virus al que se le vigila durante toques de queda para que el ejército chileno lo elimine a balas. ¡¡Que virus más extraño!! ¡¡Que elección de constituyentes más rara!!… Somos parte de Chile, donde los profesionales nos entregan las bendiciones públicas y se nos ignora en conciencia, nuestras necesidades.

LOCAL

Se nos viene una elección de concejales, alcaldes, gobernadores y constituyentes, todos ellos impuestos por reglamentos destinados a ignorar la decisión popular. Extrañamente la población acudirá a las urnas y más extraño aun, se ejerce una rara máxima sobre quienes no participamos de esta institucionalidad criminal: “Si usted no vota entonces no cuestione”. Sucede estimados lectores que hay quienes tenemos conciencia y principios y en base a ello, jamás participaremos de un sistema creado por un criminal. Existe una “democracia” aceptada por la gran mayoría de este país, aplausos por ello, pero, aun así: bizarro.

Normalmente se cuestiona, pero a su vez se debe presentar soluciones o alternativas: – Nuestros candidatos para elecciones deben salir de las bases sociales, no de las cúpulas partidistas – esa es la alternativa que una sociedad justa y consciente debiera hacer suya y asumir una libre elección real.

No es justo que Chile se someta a los corruptos de siempre, a las castas políticas que solo buscan cuidar sus intereses económicos para lo cual son asalariados por los grandes empresarios o conglomerados económicos.

En nuestra comuna tenemos concejales que han demostrado su capacidad de manera loable y que hoy se re postulan, Iris Fuentes, Fernando Contreras, de igual forma, los hay quienes solo actúan para recibir palmaditas en la espalda de parte del “jefe o sus dueños”, se olvidan que el jefe no los puso allí, ¡fue el pueblo! De igual forma tenemos un alcalde que olvidó por completo que la comunidad fue quien lo eligió, no su partido político, pero acata órdenes cual diestro mastín.

En Traiguén tenemos una amplia gama de personajes postulándose al cargo de concejal, donde los partidos políticos buscaron a sus representativos entre cuatro paredes, hicieron sus cálculos en base al grado de obediencia debida. Por otra parte, la vacante edilicia presentada a la comunidad está entre lo peor y lo malo.

Tal vez podríamos analizar de manera objetiva ambas candidaturas, pero esta redacción no busca aquello, objetiva y conscientemente se busca dar prioridad a lo menos malo, por ende, a veces y frente a lo peor debemos elegir lo “menos malo”, después de todo NO SON NUESTROS CANDIDATOS. Y Traiguén tiene, muchos ciudadanos idóneos para tal responsabilidad.

Pero que es LO PEOR: Lo peor es un alcalde que no sabe que es alcalde y por tanto es incapaz de tomar decisiones y menos sin la respectiva consulta a sus “patrocinadores politicos”, un alcalde que no sabe que en chile y su seudo democracia existe un estado de derecho, mismo que ha demostrado que las necesidades sociales tienen que solucionarlas afuerinos que ni siquiera conocen nuestra ciudad, personaje cuyos compromisos son cuestionados por asesorías externas, un alcalde que dice y se desdice mintiendo, engañando solapadamente a la comunidad, hoy, un candidato que quita las plazas de empleo a la gente de nuestra comuna para entregarlas en un cuoteo político a sus “jefes” y de paso ignorando las capacidades de nuestra propia gente. Un alcalde a quien le quedó muy, muy grande el municipio. Ya lo dicen algunos integrantes del consejo municipal “le faltan pantalones”.

Por otra parte, y lamentablemente, en nuestra ciudad no existe un medio de comunicación que permita confrontar decisiones, ideas y análisis políticos respecto del desempeño de personajes públicos, solo se venden y compran espacios al mejor postor, conducta muy bizarra y extraña respecto de lo que debiera ser un medio de comunicación.

www,traiguennoticias.cl tuvo acceso a una propuesta publica o compromiso de uno de los candidatos a alcalde, una propuesta interesante, pero, aun mezquina. Se esperaba un mayor compromiso.

Por ultimo estimado lector, si Usted concurre a las urnas por las elecciones locales, no entregue su voto a lo peor, lo malo estará mejor. Si cree que los constituyentes serán capaces de crear una “nueva” constitución… es comprensible, tal vez la “fuente” será el cambio, tamaño y forma, pero está garantizado que no se cumplirá ni una sola de las grandes expectativas soñadas y exigidas en las calles, de acuerdo a las estadísticas expuestas.

El deber cívico llama a una sociedad “cívica”. El “efecto rebaño” ya está presente hace largas décadas en nuestra sociedad.