Hasta hace algún tiempo, la Iglesia lograba una gran concurrencia de feligreses en sus templos y lugares de recogimiento, dando con ello muestras de profundo respeto por una actividad propia del mundo católico y una muestra clara de la Fe Cristiana.
Dado el gran respeto y el amor religioso, las autoridades políticas de nuestra nación decidieron optar, por otorgar un feriado legal, como fecha importante de una actividad religiosa y de recogimiento para el mundo cristiano.
Sin embargo, la modernidad y el respeto no van de la mano en nuestra sociedad y en un claro atisbo, de la degeneración de los valores tradicionales en la sociedad actual.
Hoy por hoy la mayoría de los chilenos esperan con ansias la semana santa o más bien el feriado de Semana Santa y no precisamente por tener un espacio de recogimiento religioso, sino en un claro afán por disfrutar de la poca o mísera fortuna amasada con el sudor de su frente, en ostentosos paseos de vacaciones o giras por lugares “turísticos”.
Así los medios de prensa, tv y radio, abocan gran parte de sus espacios a la promoción de paseos, asados, fiestas, destinos y demases.
Extrañamente, promoverán entre sus espacios, alguna actividad religiosa en torno a la semana santa.
Seria todo aceptable, si esta no fuera un feriado otorgado para dar espacio, tiempo y lugar a un Dios y por ende a sus representaciones terrenales, otrora devoción religiosa.
Los pilares de nuestra sociedad claramente han sido socavados hasta los cimientos por un poder disfrazado de comunicacional, llámese ignorancia en seudos conductores radiales o serviles periodistas en otros medios masivos.
El chaparron es fuerte, pero www.traiguennoticias.cl se sostiene en el rescate por la dignidad y los valores tradicionales que involucran cultura. Otra cosa, es la modernidad.